El sábado 24 de agosto de 2024, hemos tenido la gracia de ser testigos de la repuesta generosa de nuestro Hermano Rafael Huerta Ramos: ¡Aquí estoy Señor, para hacer tu voluntad!, quien ha pronunciado sus votos perpetuos como religioso de la Congregación de los Agustinos de la Asunción.
La vocación a la vida religiosa y entrega perpetua significa que abraza para toda la vida, el compromiso de vivir en comunidad y con ayuda de los hermanos, los consejos Evangélicos de: Pobreza, Obediencia y Castidad, a imitación de Jesucristo, en este caso, dentro de esta familia de la Asunción bajo la observación de la regla de vida y la espiritualidad heredada por el Padre Emmanuel D’Alzon, nuestro fundador. Pronunció sus votos ante el Superior Provincial de los Agustinos de la Asunción de América del Norte el padre Chi Ai Nguyen.
Este compromiso es una respuesta al inmenso amor y misericordia que Dios manifestado en la vida de Hno. Rafael, experiencia que así nos compartió nuestro hermano durante esta hermosa celebración Eucarística, con todos los detalles que la conformaron, comenzando por la Palabra de Dios, elegida para este día, los cantos, la ambientación, los diferentes momentos del rito de los votos, la consagración del hermano y todas las personas que acompañaron: sus papás, familia, sacerdotes, religiosos y religiosas, amigos, etc., todo, en su conjunto, forman parte de esa gran manifestación de bondad de nuestro Padre Dios hacia él y todo el pueblo de la parroquia de San Andrés Apóstol, donde aconteció este emotivo momento.
Las palabras del regional de los religiosos Agustinos de la Asunción, el padre Louis, dirigidas al hermano, enfatizaron la importancia de la oración para la vida del religioso, el vivir por la extensión del Reino, la vida comunitaria, el servicio a la Iglesia, olvidándose de sí mismo, de la propia voluntad.
Mencionó sobre la importancia de la alegría del corazón para vivir la voluntad de Dios, dando todo de él para la Iglesia, le recordó sobre el Triple Amor, al que hace referencia el Padre Emmanuel D’Alzón: Amor a Jesucristo, ser de una manera más especial de Jesucristo, todo el ser debe tender hacia Él; el Amor a la Virgen María, su madre, que María sea siempre el modelo de entrega; Amor a la Iglesia, para tener una adhesión profunda a la Iglesia.
Antes de concluir la celebración el hermano Rafael nos compartía en sus palabras que, Dios es quien sostiene los pasos y las decisiones de cada uno de nosotros porque Dios nos quiere libres, nos da su amor para poder compartirlo con los demás, así lo ha experimentado él mismo.
Este momento en el que nos dirigió algunas palabras fue tan significativo pues, él, se mostró muy conmovido, a muchos de los presentes nos invadió el mismo sentimiento de profunda gratitud hacia Dios por la vida de este hermano, por su sí generoso, por sus padres que lo acompañaron y, que también se suman a esta respuesta hacia el Dios de la vida, y es así que con el corazón agradecido fue concluyendo la celebración Eucarística.
Después, vivimos con mucha alegría los sagrados alimentos, fue un tiempo de compartir con todos los presentes, la comida, los bailables regionales, el pastel, etc., este momento fue preparado con mucho cariño, generosidad y colaboración de la parroquia y sus comunidades. Agradecemos a todos ellos por sus atenciones.
En nuestras oraciones pedimos para que esta obra de Dios continue su camino y la veamos realizada en la vida de nuestro Hermano Rafael para que pueda continuar bajo la presencia de nuestro Señor Jesucristo, con abundantes frutos. Demos gracias a Dios.
Hermana Elizabeth Velázquez Romero
Hermanas Oblatas de la Asunción, Religiosas Misioneras
Comments